martes, 31 de agosto de 2010

Vacaciones, el momento ideal para dialogar con los hijos

Vacaciones
el momento ideal para dialogar con los hijos

¡Qué bueno sería tomar conciencia, que hoy es el tiempo para dialogar con nuestros hijos en estas vacaciones!

Diálogo. ¿Qué cosa es el diálogo? Hay cientos de definiciones. Pero tomemos una sencilla de un diccionario cualquiera. Diálogo: "Charla entre dos o más personas, que alternativamente manifiestan ideas o afectos". Así de simple.

Pero, qué difícil resulta dialogar con los hijos, sobre todo si estos son adolescentes o jóvenes en camino a la madurez.

Una de las trabas principales, es la escasez de tiempo para hacerlo. No tenemos tiempo y ellos tampoco. "El fin de semana hablaré con mis hijos, los invitare al cine, compraremos nieve , jugaremos al billar, lo prometo. Juro que esta vez lo haré".

Pero..., el momento nunca llega, porque las preocupaciones de padres e hijos son muchas y cuando existe un espacio libre, están con la televisión, el Internet, los amigos, los estudios, la siesta que uno tanto necesita, después de desvelarse el fin de semana..

Pero en vez de preocuparnos, deberíamos ocuparnos. ¿Cómo hacerlo? Entre otras cosas, aprendiendo a manejar el tiempo y evitando que este nos lleve por delante.

El concedernos el tiempo necesario para entablar el diálogo, es uno de los elementos fundamentales para que éste sea posible.

Tiempo que, sumado entre otras cosas a la predisposición para hacerlo, la apertura de corazón, la necesaria escucha, el discernimiento, el buen consejo y la corrección fraterna, junto al encuentro de un espacio físico para que tenga lugar, nos asegurarán buenos frutos.

Y esto de darnos tiempo, no es cosa fácil. No sabemos bien la razón, pero el tiempo nos exige, nos empuja, nos pasa por encima y termina devorándonos.

Y así, el tiempo presente se consume vertiginosamente, atrapado entre las huellas de un pasado, que nos grita lo que no pudimos hacer y las ansias por conocer lo que puede llegar a sucedernos en el futuro.

"El tiempo vuela". "El tiempo es oro". Tantas veces hemos escuchado decir esto y siempre hay mucha verdad en los dichos populares. Pero si el oro es el tradicional símbolo de la riqueza, ¿qué mayor riqueza que entregar parte de nuestro tiempo al diálogo con nuestros hijos?

Porque como el tiempo vuela, cuando queramos darnos cuenta, ellos ya no estarán más a nuestro lado será imposible volver a dialogar.

Nosotros, los adultos, somos los que debemos tomar la iniciativa dando el primer paso. No sólo porque precisamos recibir afecto y conocer como evolucionan las ideas de nuestros hijos, sino, porque ellos lo necesitan más aún que nosotros, pues la vorágine del tiempo en que vivimos, también atrapa a los jóvenes y los desorienta.

Miedo al futuro laboral. Temor a las obligaciones. Pánico por asumir compromisos. Desmoronamiento de la escala de valores. Indiferencia. Incertidumbre. Escepticismo.

Y tantas cosas más, que podríamos decir acerca del escenario en que ellos se ven sumergidos. Ante semejante panorama, si los jóvenes están privados de diálogo en el seno del hogar, ¿a quién pueden recurrir en busca de consejos o de límites?

Lamentablemente, muchas veces el único remedio que encuentran, es escapar de la realidad con espejismos falsos , mientras nosotros, los adultos, nos quejamos de que esto suceda.

"Pero si me rompí el lomo por ellos. Todo lo hice por mis hijos. ¿Cómo es posible?" que no lo comprendan?

"Hoy lloré con mis hijos, tome café con ellos, les repetí que contaban conmigo que estaríamos juntos ". Frases que permanecerán grabadas en el corazón de nuestros hijos .Porque lo que tiene significado, no se pierde ni se vuela.

Lo vital es lo valioso, lo que nos dignifica como personas, por encima del tiempo y de nuestros logros o fracasos personales. Y nada más vital que nuestra propia trascendencia en otras vidas, como son y serán siempre nuestros hijos.

En esta sociedad, con crisis de valores, es necesario rescatar lo más valiosos que tenemos, como padres es nuestra responsabilidad la de crear un mundo mejor y de esperanza para los hijos, en el que ellos se sientan libres y creativos, para desarrollarse como personas.

¿Qué podemos hacer para que nuestros hijos tengan deseos de prosperar y de salir adelante en la vida?

Transmitirles un espíritu de lucha, de trabajo constante, de confianza en sí mismos y esto solamente se adquiere cuando el hijo se siente a gusto, querido y respetado por sus padres.

Yo los invito a ustedes padres de familia, que les pregunten a sus hijos ¿Qué es lo que quieren hacer?, ¿cómo quieren pasar el tiempo y créanme no es con más dinero, no es con lujosas camionetas, lujosos carros sino simple y sencillamente con una parte de su tiempo. .

Recuerde siempre ¡Que la calidad del tiempo que dedique a sus hijos, será el tesoro más valioso que ustedes le puedan otorgar! Por eso, para que cuando crezcan sus hijos se mantengan cerca y confíen en el buen tino de un consejo suyo, señores padres y madres de familia, en vez de prohibir, regulen y recuerden que como todo el mundo, niños y jóvenes tienen derecho a pensar distinto a ustedes, a equivocarse, a desear ganar cada vez más independencia y libertad, aunque sean como pajarillos que van y vuelan explorando el mundo pero siempre vuelven al nido.

De la manera que un padre pase su tiempo le deja saber a sus hijos lo que es importante para él. Si usted siempre esta ocupado para sus hijos, ellos se sentirán abandonados no importa lo que usted les diga,

Hay que sacrificar otras cosas, pero es esencial el pasar tiempo con sus hijos. Los hijos crecen tan rápido. Oportunidades perdidas son para siempre perdidas.

Muchas veces el único tiempo que un padre toma para hablar con sus hijos es cuando ellos han hecho algo malo.

Queremos ser muy especiales con los regalos, pero tal vez inconscientemente, estamos tratando de equilibrar nuestro amor hacia nuestros hijos con el falso supuesto que si nuestros hijos tienen mas serán mas felices ,sin pensar, nos esforzamos por complacer a nuestros hijos en sus antojos por desproporcionados que sean..y no solo por amor, sino movidos por un terrible sentimiento de culpabilidad, solo nos importa hacerlos” felices”.

Una felicidad pasajera, los regalos al final quedaran abandonados, nuestros bolsillos vacíos igual que la sensación que sentimos y sienten ellos después. Los valores verdaderamente importantes y duraderos como pueden ser el compartir en familia:

¿Será que le estamos dando demasiado a nuestros hijos? La culpa creer que no pasamos suficiente tiempo con ellos nos maneja? O tal vez queremos darles lo que nosotros no tuvimos? Les damos computadoras, zapatos de moda, ropa de marca, juegos electrónicos, discos, carros.

Tanto ellos como nosotros sentimos que algo falta pero no sabemos que es. Un vació que llenamos con resentimientos, caprichos, enojos rebeldía, cuando lo que están tratando de pedir a gritos es comprensión tiempo, amor.

Cosas que con dinero no se compran. No pregunte únicamente: “¿Qué hiciste hoy en la escuela?” Haga preguntas como: “¿Cómo te fue?” “¿Cuáles fueron tus últimas calificaciones en los exámenes?”

“¿Sientes que vas progresando?” “¿Qué fue lo más interesante que hiciste hoy?” “¿Qué fue lo que mejor hiciste hoy?” “¿Qué tienes que hacer para mañana?”

Hágales saber que usted piensa que ellos son valiosos y capaces como seres humanos y que usted sabe que pueden triunfar. Cuide las palabras y las ideas que expresa y comparte con sus hijos. Usted es una de las personas más importantes en el mundo para sus hijos y ellos quieren hacerlo feliz.

Lo que usted les dice y cómo lo dice marcará el rumbo y objetivos de sus vidas durante años. Anímelos mucho y critíquelos poco. Dígales que los ama y hágalos sentirse responsables de sus decisiones.

Explíqueles claramente las consecuencias positivas y negativas que podrían tener ciertas conductas.

"Camine al lado de su hijo, no adelante ni atrás. Ayúdelo a enfrentarse con los desafíos de la vida con usted a su lado”.

En este mundo de prisas, de apuros por ganar el dinero para vivir, los padres se olvidan de lo más valioso que les pueden otorgar a sus hijos:

Tiempo que pueden convivir con ellos. Alguna vez usted, mamá o papá se ha preguntado: ¿Qué le gustaría a mi hijo hacer hoy con nosotros?

Recuerden que para ser un adulto sano y feliz, se debe haber sido un hijo feliz, para poder amar y respetar a los demás, es importante haber sido amado y respetado.

El momento de hablar con tus hijos

Comience por hablar con sus hijos. Tome tiempo para escuchar sus ideas y problemas.

Recuerde a sus hijos de las consecuencias por sus acciones. Los padres son un modelo para sus hijos,

Los hijos tienen la necesidad de saber que ellos son deseados, aceptados y amados por su familia.

Especialmente los papas necesitan sentirse cómodos y dispuestos a abrazar a sus hijos. Enseñando afectos todos los días es la mejor manera de mostrarle a sus hijos que usted los ama.

¿Cuándo hay que castrar a una perra?

¿Cuándo hay que castrar a una perra?

Por qué, cuando y cómo conviene esterilizar a una perra, sin que este procedimiento resulte dañino para su salud



Cuándo y cómo realizar la castración

El momento de llevar a cabo este procedimiento es tan importante como el lugar que se elija para realizarla y los profesionales que tendrán a su cargo la operación.

Habrá que tener en cuenta el estado general del animal, considerando que en el caso de una perra demasiado longeva o que presente problemas de salud no es recomendable efectuar la esterilización por los riesgos que puede correr el animal.

Es importante considerar que el mejor momento para realizar la esterilización es entre los 6 y 7 mesas de edad, ya que el celo en las perras aparece entre los 6 y 8 meses.

Si se realiza con posterioridad al primer celo, el momento ideal es el período de anestro, es decir 3 meses después de haber concluido los signos característicos de celo en el animal.

La operación no es complicada y se realiza con anestesia general, por ello hay que mantener a la perra en ayuno las 8 o 12 horas previas a la cirugía. La intervención consiste en la extracción de los ovarios y en algunos casos, también del útero.

Debido a que no se presentan demasiados problemas postquirúrgicos, luego de un descanso breve, la perra puede volver a casa ese mismo día.

Durante los días posteriores a la esterilización, la perra puede estar más apagada y no querer comer la cantidad de alimento habitual, debido a la sensación de náuseas que en ocasiones se puede presentar en el animal.

Sin embargo, estos son inconvenientes absolutamente normales que desaparecen luego de un par de días y no le impiden a la perra continuar con sus hábitos normales.

Luego de una semana, se retira la sutura de piel y podrá utilizarse un vendaje de protección o un collar isabelino para evitar que la perra pueda quitarse los puntos de sutura.

Mitos y creencias sobre la castración

Existen algunos mitos o falsas creencias con respecto a la esterilización, que es importante despejar para no generar malos entendidos ni confusiones a la hora de realizar la operación y que además tranquilizarán a los dueños cuando decidan llevarla a cabo.

A pesar de la creencia generalizada, hacer que una perra tenga cría para cubrir las necesidades de un macho, no siempre es necesario.. Y de hecho, la mayor parte de las veces, es recomendable que los machos y las hembras sean castrados y esterilizados a edad temprana.

En estado salvaje, en una manada de perros, no todas las hembras tienen cría, incluso a algunas se les retira el celo y no por ello dejan de tener una vida placentera y feliz.

En la actualidad, diversos estudios veterinarios demuestran que la castración temprana en los perros es una especie de seguro de vida y longevidad, y en muchos casos previene enfermedades y complicaciones de la vida adulta de un animal.

Por ello, a continuación se enumeran algunos falsos mitos y consejos útiles para tener en cuenta en el momento de decidir o llevar a cabo la esterilización:

*No es necesario que las perras tengan cría al menos una vez.

*Si se hace tener cría a la perra es porque se sabe que se va a hacer con los cachorros. No se debe incrementar aún más la ya excesiva población de perros abandonados.

*La esterilización de las perras no predispone a la obesidad, ni produce trastornos de comportamiento. Es necesario continuar con el mismo estilo de vida y adaptar la alimentación a la nueva actividad de la perra.

*La esterilización evita las principales molestias (para los propietarios) del celo en las perras, por ejemplo, la secreción sanguinolenta vaginal, la tendencia de las perras a escaparse y la atracción de los perros machos.

*La castración en las perras previene la aparición de cáncer de mamas en un alto porcentaje de casos. Esto se debe a que en las perras las hormonas que producen los ovarios tienen una importante influencia en el desarrollo de los tumores de mama.

*Si la cirugía se realiza antes del primer celo las posibilidades de tener un cáncer de mama son casi cero. En cambio si se realiza después del primer celo las posibilidades se incrementan hasta el 7%, subiendo hasta el 25% si se realiza después del segundo celo.

*Evita la transmisión y extensión de enfermedades hereditarias y no perjudica la salud del animal.

*El uso de anticonceptivos para prevenir, anular o retrasar el celo en las perras puede producir enfermedades uterinas.

lunes, 30 de agosto de 2010

Diversión en la playa: cuidados

Peligros de los hoyos en la arena
Hoyos en la playa, ¿costumbre peligrosa?

¿Quién no ha cavado agujeros en la arena? Todos, en algún momento, nos hemos divertido en vacaciones escarbando en la arena por algún motivo; para enterrar parte de nuestros cuerpos, para buscar un tesoro escondido, para juntar arena para armar un castillo, etcétera.

Bien, aquí van las buenas nuevas: según un reciente estudio, esta actividad inocente puede ser riesgosa e incluso mortal.

En la década pasada, ha habido reportes de 31 decesos y 21 casos no fatales de personas sumergidas en la arena cuando los agujeros que cavaban por simple diversión colapsaron.

Estos casos están registrados en un artículo publicado en The New England Journal of Medicine.

El equipo autor del estudio reportó que las victimas de los agujeros de arena colapsados tenían entre 3 y 21 años de edad —y un promedio de 12 años—. La mayoría de los casos ocurrieron en playas públicas, cerca de la costa.

Hoyos peligrosos

Los agujeros fueron cavados por las mismas víctimas, o por amigos o parientes de éstas. Generalmente, según el informe, los pozos tenían entre 50 centímetros y 5 metros de diámetro y 50 centímetros a cuatro metros de profundidad.

Los derrumbes de arena ocurren en hoyos ordinarios que cava la gente —algunos con sólo unos pocos centímetros de profundidad— y en túneles que colapsan. En algunos casos, las personas se caen en hoyos ya existentes y la arena se derrumba a su alrededor.

En muchos casos, a los padres y otros adultos les cuesta determinar el lugar donde se encuentra la víctima porque la arena se derrumba sobre ésta sin dejar rastros. Esto dificulta los esfuerzos de rescate, ya que el lugar en el que se debe cavar no está claro, y no se puede usar un equipo pesado.

El colapso de la arena ocurre muy a menudo en la playa, pero puede suceder en otros lugares como lagos o incluso en los patios traseros de las casas.

De hecho, han habido reportes anteriores de muertes infantiles por enterramientos en la arena en sitios de construcción e incluso en cajas de arena, advierten los expertos.

Sin embargo, es necesario aclarar que no todas las playas son susceptibles al colapso de la arena. Por ejemplo, las playas del sur de California tienen, por lo general, una arena demasiado densa para una excavación profunda.

Divertirse con seguridad

El sentido común, una vez más, es nuestro mejor aliado. No cavar hoyos que superen la altura de la rodilla cuando la persona está de pie es recomendable.

Esta regla aplica igual para niños y adultos. Y si se cava un hoyo bien profundo, será sensato taparlo cuando te vayas. Las playas no son la única zona peligrosa para los hoyos de arena.